dissabte, 31 de juliol del 2010

Alzamiento de Varsovia


El Alzamiento o Levantamiento de Varsovia (en polaco: Powstanie Warszawskie) tuvo lugar durante la ocupación nazi de Varsovia durante la Segunda Guerra Mundial. Fue planificado por el Armia Krajowa o Ejército Territorial, que representaba al gobierno constitucional en el exilio. Formaba parte de la llamada Operación Tempestad, cuyo objetivo era liberar Polonia antes de que lo hiciera la Unión Soviética. Las tropas polacas sostuvieron durante 63 días el asedio alemán, pero ante la falta de apoyo aliado, finalmente fueron superadas por las mucho mejor equipadas tropas alemanas. El final de la contienda se saldó con 250.000 civiles de Varsovia muertos, la mayoría ejecutados, y más del 85% de los edificios de la ciudad destruidos.

Cuando el Levantamiento empezó, el Ejército Rojo se encontraba a decenas de kilómetros de la capital y al llegar el 16 de septiembre, sólo debían cruzar el río Vístula para liberar Varsovia. Sin embargo, los soviéticos se detuvieron, lo que ha llevado a la mayoría de los historiadores a concluir que Stalin prefería que la sublevación fracasara, para poder gobernar Polonia con mayor facilidad durante los años de la Guerra Fría. Los soviéticos por su parte aseguraron que frenaron su avance por problemas de abastecimiento, ya que sus líneas de suministros estaban sobrextendidas desde la Operación Bagration.
Contenido
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* 1 Antecedentes
* 2 Fuerzas polacas
* 3 Fuerzas alemanas
* 4 Inicio del levantamiento
* 5 Fin del levantamiento
* 6 Capitulación y eventos posteriores
* 7 Curiosidades
* 8 Bibliografía
* 9 Enlaces externos

[editar] Antecedentes

El descubrimiento en 1943 de la Masacre de Katyn, donde miles de oficiales polacos fueron asesinados por las fuerzas soviéticas, dañó de forma irreparable las relaciones entre la Unión Soviética y el gobierno polaco constitucional, exiliado en Londres desde 1939.

Al ir liberando el Ejército Rojo los países ocupados por Alemania, quedó claro para los polacos que Stalin no permitiría que se restableciera el gobierno democrático en su país. Preocupado por esto, el gobierno polaco en el exilio ordenó a los generales del Armia Krajowa, el ejército de resistencia polaco, que intentaran liberar Polonia antes de que los soviéticos lo hicieran. Si bien era obvio que este ejército no contaba con suficientes recursos para mantener el país, pensaban expulsar a los alemanes por un tiempo nada más, suficiente para que los aliados liberaran Polonia definitivamente.

El 13 de julio de 1944 los soviéticos llegaron a la antigua frontera polaco-soviética, y los generales del Armia Krajowa tuvieron que tomar una decisión: luchar contra Alemania, a pesar de que no contaban con apoyo extranjero concreto y recursos suficientes o esperar a la llegada del Ejército Rojo, sabiendo que la propaganda soviética había acusado al Armia Krajowa de colaborar con los nazis y de ser unos cobardes. Además, los polacos tenían conocimiento de que los miembros del Armia Krajowa que habían participado en el Levantamiento de Wilno (actual Vilna), habían sido ejecutados o enviados a los gulags rusos.

El 27 de julio, el gobernador nazi de Polonia, Hans Frank ordenó a 100.000 polacos que se presentaran en distintos puntos de la ciudad, para ayudar en la construcción de fortificaciones. El Armia Krajowa vio esta orden como un intento de desmembrar la resistencia polaca y ordenó a su vez que la orden alemana no fuera acatada.

Mientras tanto, la propaganda soviética intensificó sus ataques contra la resistencia polaca, asegurando que ésta estaba esperando con los brazos cruzados a que la Unión Soviética liberara Varsovia. Al mismo tiempo, radió mensajes a Polonia, urgiendo la necesidad de alzar el país y de cortar las líneas de comunicación alemanas.

El 29 de julio, las primeras tropas soviéticas llegaron a los suburbios de Varsovia, en la orilla oriental de río Vístula. Este episodio es conocido como la Batalla de Radzymin.

Preocupados de que al ignorar la orden del 27 de julio se produjeran represalias contra la población civil, los generales polacos decidieron adelantar el levantamiento y el 1 de agosto, el general Tadeusz Bór-Komorowski llamó a sus tropas a movilizarse.
[editar] Fuerzas polacas
Monumento al Alzamiento de Varsovia.

El Ejército Territorial polaco contabilizó 50.000 hombres y mujeres. De estos 23.000 fueron contabilizados como veteranos, si bien la experiencia de muchos de ellos consistía en la lucha partisana y no tenían experiencia como soldados regulares. Debido a que la decisión de incluir a Varsovia en la Operación Tempestad fue cosa de último minuto, muchos miembros del Ejército Territorial se encontraban en otros frentes, sin embargo grupos partisanos independientes acudieron a la llamada de Varsovia. Entre estos se encontraban grupos de judíos que habían escapado del Gueto de Varsovia antes de su destrucción.

El General Antoni Chruściel, alias Monter, comandó las fuerzas polacas, dividiéndolas en ocho áreas:

* Área I: Śródmieście, centro y ciudad antigua. Al este del gueto judío.
* Área II: Żoliborz, Marymont, Bielany. Norte de la ciudad.
* Área III: Wola. Oeste de la ciudad.
* Área IV: Ochota. Suroeste de la ciudad.
* Área V: Mokotów. Sur de la ciudad.
* Área VI: Praga. En el norte de la orilla oriental del río Vístula.
* Área VII: Powiat Warszawski. Suburbios de la ciudad.
* Grupo de sabotaje Kedyw

El 20 de septiembre estas fuerzas fueron reorganizadas en tres divisiones de infantería.

Para el día del alzamiento, el Ejército Territorial poseía los siguientes recursos:

* 1.000 fusiles
* 1.700 pistolas
* 300 pistolas automáticas
* 60 subfusiles
* 7 ametralladoras, incluyendo MG34 y MG42
* 35 armas antitanque, incluyendo PIATs
* 25.000 granadas

Durante el alzamiento, los aliados occidentales arrojaron armas sobre Varsovia. Sumando a esto el botín obtenido de los alemanes, se incrementó el armamento y hasta se obtuvieron vehículos blindados. En las fábricas se pudieron producir 300 pistolas automáticas, 150 lanzallamas, 40.000 granadas, muchos morteros y hasta un automóvil blindado.
[editar] Fuerzas alemanas

Para el 1 de agosto, la guarnición alemana de Varsovia consistía en 10.000 soldados bajo el mando del General Rainer Stahel. Sumando a las tropas ubicadas en la orilla oriental del río Vístula y los miembros de la policía y las SS presentes en Varsovia, la fuerza alemana total oscilaba entre 15.000 y 16.000 hombres. Estas tropas se habían estado preparando durante meses para resistir en la ciudad, y se habían construido cientos de búnkeres de hormigón y muros de alambre de púas para proteger los edificios guardados por los alemanes. Además, unos 90.000 soldados adicionales se encontraban en regiones aledañas a la capital. Para el 23 de agosto se encontraron las siguientes unidades alemanes combatiendo:

* Grupo de Batalla Rohr (comandado por el Mayor General Rohr)
* Grupo de Batalla Reinefarth (comandado por el SS-Gruppenführer Reinefarth)
* Grupo de Ataque Brigada Dirlewanger
* Grupo de Ataque Reck (comandado por el Mayor Reck)
* Grupo de Ataque Schmidt (comandado por el Coronel Schmidt)
* Guarnición de Varsovia (comandada por el Teniente General Stahel)
* Varias unidades de apoyo que incluían a rusos, cosacos y azeríes.

[editar] Inicio del levantamiento

El 1 de agosto, a las 17:00 horas se inició la sublevación. Una mujer polaca avisó a los alemanes de los planes clandestinos, y las tropas habían empezado a movilizarse para el inicio del alzamiento, si bien no contaban con ningún plan para hacerle frente. El levantamiento tuvo problemas desde el inicio, ya que si bien el centro de la ciudad y la ciudad vieja fueron liberados exitosamente, en Wola las tropas polacas sufrieron grandes bajas para poder capturar sus objetivos. En Mokotów, los alemanes aplastaron la insurgencia polaca, mientras que en Praga, la alta concentración de fuerzas alemanas obligó a los insurgentes a regresar a sus escondites. El resultado fue lamentable, pues a pesar de que los polacos pudieron capturar grandes zonas de la ciudad, los distintos grupos quedaron aislados, incapaces de contactar entre sí.
Barricada ubicada en la plaza Napoleón (actualmente Plac Postańców), conformada entre otras cosas por un tanque alemán capturado

Al perder la iniciativa, los polacos empezaron entonces a adoptar una actitud defensiva y empezaron a construir barricadas a lo largo de toda la ciudad. El 4 de agosto fue el día en el que el Ejército Territorial ocupó la mayor cantidad de territorio durante el alzamiento. Ése mismo día empezaron a llegar los refuerzos alemanes bajo el mando del SS-Obergruppenführer (general de ejército) Erich von dem Bach-Zelewski, que inmediatamente empezó a presionar para hacer contacto con las bolsas aisladas de alemanes. El 5 de agosto los insurgentes ocuparon las ruinas del gueto judío. Ese mismo día, siguiendo las expeditivas órdenes de Hitler de «convertir la ciudad en un lago», el SS-Gruppenführer (teniente general) Heinz Reinefarth reunió a unos 40.000 civiles y los ejecutó, este episodio es recordado como la Matanza de Wola. Esta acción junto con otros excesos alemanes contra la población civil son mejor entendidos al explicar la lógica del Alto Mando Alemán, que creía que si ejecutaban a todo polaco capturado, la moral de los combatientes caería, lo que llevaría a una rendición prematura. Sin embargo, la ejecución de esta política fue contraproducente, ya que cuando los insurgentes conocieron el destino que les aguardaba si eran capturados, su voluntad de luchar se incrementó, porque pensaron que no tenían otra opción. Eventualmente los comandantes alemanes se dieron cuenta de esto y a finales de septiembre, a los polacos capturados se les empezó a otorgar el trato de prisioneros de guerra.

El 5 de agosto empezaron a llegar más tanques alemanes a la zona, con civiles polacos adheridos como escudos humanos. Después de dos días de intensos combates, los alemanes lograron cortar el distrito de Wola en dos, y llegaron a la Plaza Bankowy.

Entre el 9 de agosto y el 18 de agosto se libraron intensas batallas entre los alemanes y los polacos alrededor de la ciudad vieja y cerca de la plaza Bankowy. Los alemanes hicieron gala de la mismas tácticas que utilizaron en la invasión de Polonia unos años atrás. Éstas incluían el bombardeo de hospitales con banderas de la Cruz Roja por la Luftwaffe, así como el asesinato de médicos y enfermeras. Para finales de septiembre los defensores de la ciudad vieja fueron superados, y el 2 de agosto de 5300 hombres y mujeres se batieron en retirada por las cloacas, que para aquel entonces eran un importante medio de comunicación de la insurgencia.

La llegada del supercañón Schwerer Gustav y de los bombarderos alemanes condenó a la destrucción a decenas de los edificios de Varsovia. La resistencia polaca, sin artillería y armas antiaéreas, observó impotente cómo su capital era demolida.
[editar] Fin del levantamiento

El 10 de septiembre las tropas soviéticas alcanzaron el margen oriental del río Vístula y capturaron los suburbios al este de Varsovia. Emisarios del Ejército Territorial polaco se reunieron con los comandantes soviéticos y les propusieron la formación de un regimiento de fuerzas mixtas. Sin embargo inmediatamente agentes de la NKVD arrestaron a los emisarios y la conversaciones finalizaron abruptamente.
Mapa del Frente Oriental en 1944, donde se muestra que el frente no mostró avances frente a Varsovia entre el 19 de agosto y el 25 de diciembre

En efecto, los soviéticos se negaron a prestar ayuda al levantamiento, justificándolo con que el 2º Frente Bielorruso que se encontraba frente a Varsovia había sufrido un 28% de bajas al cruzar Bielorrusia y entrar a Polonia. Los alemanes no encontraron explicación a la pausa que realizó el Ejército Rojo; de hecho, en el diario del 9º Ejército Alemán se encuentra la siguiente anotación: «En contra de nuestras expectativas, el enemigo ha detenido su ofensiva a lo largo de todo el frente del 9º Ejército».

Sin embargo, el 26 de agosto, el general Zygmunt Berling ordenó reanudar los ataques contra el IV Ejército SS Panzer, y poco a poco los alemanes fueron empujados hasta el sector Praga de Varsovia, para luego tener que retirarse a la otra orilla del río Vístula.

El ejército «soviético» que intentó capturar Varsovia fue en realidad el 1º Ejército Polaco, que estaba bajo las órdenes de la Unión Soviética. La vanguardia de este ejército llegó hasta los sectores de Czerniaków y Powiśle, donde establecieron contacto con el Ejército Territorial. Pero al no contar con apoyo aéreo y adecuada cantidad de artillería, estas unidades fueron obligadas a batirse en retirada. La falta de apoyo del Ejército Rojo frustró los intentos de los dos ejércitos polacos de restablecer el enlace. Inmediatamente el general polaco Zygmunt Berling que mandaba el 1º Ejército Polaco fue relevado de su mando, y el nuevo comandante ordenó suspender toda actividad ofensiva «por lo menos cuatro meses».

En este punto, los polacos entendieron que no podían esperar apoyo externo, y si bien continuaron la lucha fue con la esperanza de que la resistencia obligara a los alemanes a disminuir la dureza de las condiciones de rendición.
[editar] Capitulación y eventos posteriores

El 2 de octubre, el general Tadeusz Bór-Komorowski firmó la capitulación, que se aplicaba a todas las tropas polacas del Ejército Territorial, en el Cuartel General alemán, estando el general Von dem Bach presente. De acuerdo con el documento firmado, la Wehrmacht se comprometía en tratar a los polacos sublevados de acuerdo con los términos establecidos en las Convenciones de Ginebra, además de respetar la vida de los civiles de Varsovia. La lucha fue muy intensa, tanto así que el jefe de las SS, Heinrich Himmler anotó el 21 de septiembre de 1944: «Una de las más mortíferas batallas desde el comienzo de la guerra, tan difícil como la lucha por Stalingrado». Obviamente esto fue una exageración, ya que las cifras de bajas en Stalingrado hacen palidecer a las de Varsovia.

Al día siguiente de la capitulación, se empezó a desmantelar el Ejército Territorial. Unos 15.000 polacos fueron enviados, en calidad de prisioneros de guerra, a distintos campos en Alemania. Entre 5.000 y 6.000 combatientes se escurrieron entre la población civil, con la esperanza de levantar al pueblo de nuevo en el futuro. La población entera de Varsovia fue enviada al campo de concentración Durchgangslager 121 en Pruszków, de manera temporal. Se calcula que entre 350.000 y 550.000 civiles fueron enviados a ese campo, de los cuales 90.000 fueron enviados luego a campos de trabajo en Alemania, 60.000 enviados campos de la muerte en (Ravensbruck, Auschwitz, Mauthausen, entre otros). El resto fue dispersado por el Gobierno General de Polonia.

Una vez Varsovia estuvo vacía, los alemanes continuaron con la demolición de la misma. Grupos de ingenieros alemanes llegaron a la zona para iniciar la demolición controlada de los edificios que habían sobrevivido. Siguiendo las órdenes de Hitler, se empezaron a trazar planes para convertir Varsovia en un lago. Con la ayuda de explosivos y lanzallamas, casa por casa fueron arrasadas. La destrucción fue organizada, prestando especial atención en los monumentos históricos, en los archivos nacionales y en los distintos puntos de interés.

Para enero de 1945, el 85% de los edificios habían sido destruidos: el 25% durante el Alzamiento, mientras que el 35% fueron destruidos posteriormente por los escuadrones de ingenieros. El resto había sido destruido antes, durante el alzamiento del Gueto de Varsovia (15%) y la invasión de Polonia en 1939 (10%).

Se calcula que en total fueron destruidos 10.455 edificios, así como 923 edificios históricos (el 94% del total), 25 iglesias, 14 bibliotecas incluyendo la Biblioteca Nacional, 81 escuelas de primaria, 64 escuelas secundarias, la Universidad de Varsovia y la Universidad Politécnica de Varsovia. Cerca de un millón de personas perdieron todas sus propiedades. El número de pérdidas se calcula en cerca de 40.000 millones de dólares estadounidenses de 1939. En 2004, el gobierno de Varsovia calculó que las pérdidas en propiedad municipal se acercaban a los 45 billones de dólares estadounidenses de 2004. Por supuesto esto no incluye a las propiedades de los habitantes de la ciudad. El concejo municipal de Varsovia continúa solicitando hasta el día de hoy, una indemnización a Alemania. La reconstrucción de Varsovia, se realizó con la ayuda de paisajes realizados por las escuelas de arte de los pintores italianos Bacciarelli y Canaletto siglos atrás.

Finalmente 17 de enero de 1945, el Ejército Rojo entró en las ruinas de Varsovia, cruzando el río con relativa facilidad. En cuestión de horas capturó toda la ciudad, encontrando la mayor resistencia en el área de lo que era la Universidad de Varsovia, donde sin embargo lograron barrer a los defensores alemanes en una hora. Esta rápida victoria se logró en parte porque unas semanas antes, el IV Cuerpo SS Panzer había sido retirado para participar en la batalla

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